¿Sabía que durante la construcción del segundo túnel submarino de la bahía de Jiaozhou, en Qingdao (Shandong), una superficie de túnel del tamaño de la palma de una mano debe soportar una presión equivalente a una tonelada? Adentrémonos en este superproyecto y veamos cómo los constructores de CCCC logran su "viaje a través del mar" bajo una gran presión del agua.
El túnel tiene una longitud total de 17,48 kilómetros, incluyendo un tramo submarino de 9,95 kilómetros, lo que lo convierte en el túnel de carretera submarino más largo del mundo hasta la fecha. En el Congreso Mundial de Túneles de 2024, el proyecto fue seleccionado como uno de los "50 proyectos emblemáticos en ingeniería subterránea y de túneles a nivel mundial".
El equipo de CCCC ha logrado atravesar una extensa zona de falla fracturada mediante el uso de la máquina de escudo de gran diámetro "Shen Lan", resolviendo desafíos de nivel mundial bajo condiciones extremas.
El equipo emplea tecnologías innovadoras para mejorar la resistencia, la impermeabilidad y la protección contra la corrosión de los segmentos de tubería del túnel, lo que permite mantener eficazmente el agua del mar fuera del túnel.
El equipo ha desarrollado un sistema de supercomputación que puede captar de forma completa y precisa todos los datos críticos durante las operaciones de excavación con la máquina de escudo, lo que proporciona sólidas garantías para la seguridad de la construcción y el progreso eficiente.
El sistema integrado de "preparación, almacenamiento e inyección de lechada" funciona como una "fábrica mágica" autosuficiente para la máquina de escudo, lo que reduce eficazmente los desplazamientos de transporte dentro del túnel y mejora la eficiencia de la construcción en aproximadamente un 15%.
Además, aprovechando tecnologías avanzadas como IA, 5G, BIM, gemelos digitales e Internet de las Cosas, se ha creado una plataforma de construcción digital a decenas de metros bajo el nivel del mar, lo que permite al equipo supervisar el progreso de la construcción en tiempo real.
Una vez finalizado, el túnel reducirá el tiempo de viaje entre Huangdao y Qingdao a solo 15 minutos, lo que fomentará el desarrollo integrado de las orillas este y oeste de la bahía de Jiaozhou.